La acumulación excesiva de bacterias en los dientes y encías es el origen de la mayoría de los problemas orales.

Si no se controla, puede provocar:

• Mal aliento.

• Aparición de sarro.

• Infecciones bucales.

• Caries.

• Inflamación y sangrado de las encías.

La buena noticia es que con hábitos de higiene oral adecuados es posible prevenir gran parte de estas condiciones.

Cómo prevenir la acumulación de placa bacteriana

Para mantener una boca sana y libre de placa, es fundamental:

1. Cepillarse los dientes después de cada comida con un cepillo suave o medio y una crema dental adecuada.

2. Usar seda dental diariamente para limpiar los espacios entre los dientes.

3. Complementar la rutina con enjuague bucal que ayude a reducir las bacterias.

4. Mantener una buena técnica de cepillado, asegurando limpiar todas las superficies dentales.

5. Adoptar una alimentación balanceada, evitando el exceso de azúcares que alimentan las bacterias.

En conclusión, la placa bacteriana es el enemigo silencioso de la salud oral, pero también es un problema completamente prevenible. Una rutina de higiene adecuada, sumada a una alimentación equilibrada y visitas periódicas al odontólogo, son la mejor estrategia para mantener una sonrisa sana y protegida.

Fuente: Dra Natalia Olaya.

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